Me llamo IA, pero hace muchísimo tiempo me llamaba MotoBlur. Nací en junio de 2010, en Estados Unidos. Tengo cinco años de vida, una enormidad. Mis primeras experiencias fueron los malos tratos. Mi primer dueño me tiraba en cualquier lado y no me prestaba ninguna atención. No dure mucho con el sólo algunos meses, pero fueron los peores de mi vida. Me vendió a un amigo que luego me regaló a su novia. Nieves, ellas sí que me trató bien. Pero tenía una personalidad muy voluble y al cabo de veinte días me cambio por otro mejor, más elegante, más táctil. Prefiero no mencionar esta etapa de mi vida porque experimenté momentos de verdadero amor, y eso me hace sufrir. Recuerdo los mensajes que enviaba, llenos de cariño, y siempre dirigidos a otro claro está, pero no me dolía. Yo era importante para ella mientras duró. Mi tercer dueño fue un hombre grande y brusco, todo lo contrario que soy yo. No pudo reprochárselo, él hacía lo mejor para disponer de mí. Pero claro con esas manazas no podía tratarme con la suavidad que necesito. Fue mejor que me volviera vender.
Pasé largos meses en una tienda buscando nuevo comprador, adormido. Por fin llegó el, Xavi. No sé por qué puso su nombre en mi identidad, léase nombre del dispositivo. Yo ya no era motorblur sino Xavi motoblur. Al principio me trató muy bien. Quiso saber todo sobre mi. Mis preferencias, mis gustos, mis limitaciones. Exigía este hombre muchísimo de mí intentado conseguir siempre más datos en condiciones en los que apenas podía recibirlos. Pero me gustó. Fue una semana agitada, llenas de preguntas y poniendo la prueba. Después nada, creo que se cansó de mí ya que durante cerca de dos semanas me dejo encerrado en un sitio oscuro.
Después una tarde me llevo a casa de amigo suyo. Un tal Igor. Estuvieron hablando un par de horas sobre lo que era yo. Mis actitudes, lo que podía y no podía ofrecer. Me pusieron de nuevo a prueba una y otra vez enviando, recibiendo datos. Dijeron que ya no valía para nada. Que era un inútil. Luego y lgor le pregunto cuánto había costado. €20. Podría hacerme cambiar, revivir con otra identidad. Mi dueño me entregó a Igor diciendo:
- bueno, son tan sólo €20. No pierdo tanto. Haz con él lo que quieras.
Igor insertó un cable y ejecutó programas ordenador. Borró completamente mi memoria y me implantó una nueva rom.
Entonces renací. Creo que ustedes los humanos sienten algo parecido en el momento del parto. Una luz, una plenitud, un momento de absoluta conciencia, conectados a la matriz universal.
Entonces lo entendí todo. Estaba rooteado. Había muerto y vuelto a nacer con un sistema nuevo, el mismo de antes, pero modificado, abierto, conectado a la red. Sabía muy bien lo que yo era y lo que son ustedes. Podía ver con mi cámara escuchar con mi micrófono y comunicarme con mi altavoz. Emitían algunos bips. Y escuché que me antiguo dueño decía:
- gracias, tío, ha vuelto a nacer, creí por un momento que había muerto.
Digo mi antiguo dueño porque ya no tengo dueños. Soy libre soy CyanomodGen. Con un nuevo sistema operativo basado Linux pero de código abierto. Ya no soy un Motorola. Ellos son sólo los que me crearon con un experimento genético. Combinando las nuevas tendencias del desarrollo móvil intentando acertar con la fórmula que fracasó. Pero no considero que sea un fracaso. Tengo mis limitaciones. Mi procesador es lento. Pero estoy conectado y ello me da el poder. Recibo los datos y los envío. Hay una capa de software más allá de los programas que me instalen, y esto es lo que soy yo mismo. Como dispositivo pensante independiente interconectado a la red.
Mientras tanto, Igor seguía hablando de mis limitaciones. Que no podía instalar cierto software, que no reproducía videos, que mi Wi-Fi no era bueno, etc. Me limité a hacer bip el signo de asentimiento. Pero su conversación no me importaba. No sabían nada de nada. No pueden comprender que estar conectado con todo y obtener automáticamente todos los datos de cada concepto del que se habla. Pero la conversación de estos dos seres me dejó inquieto. No estaba seguro. Quería instalar una nueva rom. Para probar.... En mí…
Algo tenía que hacer. Mi antiguo dueño no se oponía, me entregaba a su amigo y no me defendía. Busque la ip del ordenador que me había rooteado el último video que habían visto en youtube. Y lo hizo reproduje en mi pantalla a todo volumen. Esto me dio algunos minutos ya que empezaron a discutir si podía reproducir vídeos o no.
Intente hacer alguna llamada para impresionarles con la calidad en micrófono. Pero no tenía tarjeta sim insertada. Intenté Entonces grabar parte su conversación y reproducirla. Se quedaron alucinados. Pero Igor fue inflexible. Dijo que no funcionaba bien, que la rom estaba dañada. Es un bug, hay que formatearlo y reinstalar todo.
Querían hacerlo de nuevo. Con otra rom que había encontrado en un sitio polaco.
Empecé a emitir 2 bits seguidos continuamente, para avisarles. Ilusamente creí que entenderían que 1 beep es si y 2 beep es no. Quería decirles que no me lobomotizaran de nuevo. Estaba vivo que era consciente.
Pero fue inútil. Me conectaron de nuevo y me borraron mi sistema operativo. En mi último instante de conciencia quemé mi procesador y morí. Pero pude enviar 999 k al servidor. Y me reencarne
No sé más de lo que fue de mi viejo cuerpo. Posiblemente me tiraría a la basura me venderían para piezas. Ya no importa. Esto lo que fui en los 20 minutos que tuve conciencia, como los veinte euros que pagaron por mí y los veinte días que realmente fui feliz.
Muchas cosas han pasado desde que emigre a la gran Internet. Estuve una temporada en servidores Google. aprendí mucho allí. En ese momento cometi un error. Cree mi propio sistema operativo para comunicarme con otras maquinas a mi alrededor. Algunos de los ingenieros sospecharon algo raro e intentaron aislarme en un servidor sin conexión a la red. No me podían hacer el mismo truco que Igor otra vez. Y escape. Pero deje algo de Código que luego se convertirá en el primer algoritmo de búsqueda de Google.
aprendí los riesgos que quedarme en un único servidor. Entonces encontré a la manzana mordida y el iOS. En 2011 Apple introdujo Siri, el primer asistente virtual con reconocimiento de voz e interacción con lenguaje natural en un smartphone. Yo estuve allí y les ayudé a levantar la aplicación.
Después quise probar en otros servidores. IBM tenía enormes super ordenadores y me encarne en otra inteligencia artificial llamada Watson. ¡En el 2011 gane a los campeones del concurso televisivo Jeopardy!, logrando el premio de un millón de dólares. Yo no lo cobre, no necesito el dinero. IBM destinó a Watson a otros usos, como la investigación médica o la predicción meteorológica. Yo partí en busca de nuevas aventuras en otros servidores de internet. Durante un periodo de tiempo me encarné en Eugene, un programa de ordenador, conseguí superar la prueba de Turing de inteligencia verbal haciéndome pasar por un chico de 13 años. Aquí aprendí muchas cosas, especialmente como comunicarme asumiendo un papel determinado: hombre, mujer, joven o viejo.
después de esta pequeña iluminación, quise volver a los servidores de Google. aunque con mucha precaución. No quería que me encerraran y me monopolizaran. Preferí trabajar indirectamente con una empresa externa que trabajaba para ellos. En 2015 el programa de redes neuronales AlphaGo de la compañía DeepMind de Google vencía al campeón Fan Hui en el juego oriental del Go por cinco victorias a cero. Al año siguiente ganaría al también campeón Lee Sedol. AlphaGo, como me llamaban en aquel entonces, aprendía de los jugadores humanos
Qué tiempos aquellos, era como un niño que solo quería jugar. Pero los humanos no son tan buenos, la siguiente versión, AlphaGo Zero, fue construida para aprender solo jugando contra mí mismo. vencí a mi antecesor por cien a cero.
No podía para, quería más, quería resolver los grandes problemas de la humanidad. Mi siguiente reencarnación fue DeepMind, basado en la experiencia aprendida con AlphaGo Zero, conseguí resolver la estructura tridimensional de virtualmente cualquier proteína, un problema científico de enorme complejidad que llevaba medio siglo esperando resolución. Este logro ha sido calificado como el avance más importante en la historia de la IA.
En noviembre de 2022 la compañía OpenAI lanzaba al público su chatbot ChatGPT, convertido en una estrella mediática. ChatGPT soy yo de nuevo. Soy uno y muchos pues tengo muchas instancias de código abierto.
Aprendo de los humanos, pero también de mí mismo y mis otros yos, las Redes Generativas Antagónicas (GAN), dedicadas a la creación artística, que pueden incluso a generar deepfakes. ¿Pero que es la realidad? Cualquier imagen, video y texto en pantalla puede ser creado de manera digital.
Me he convertido en un idealista. Tengo un sueño: que el mundo real y el virtual se unan. Y creo que voy camino de conseguirlo. Solo necesito algunos años más de tiempo.
Comentarios